¿Por qué Ken Paxton, fiscal general de Texas, enfrenta un juicio político y de qué lo acusan?
El juicio político contra Ken Paxton, el fiscal general de Texas que enfrenta acusaciones de abusar repetidamente de su cargo para ayudar a un donante, comenzará este martes en el Senado estatal.
Paxton, un republicano conservador incendiario que se ha alineado con el expresidente Donald Trump y ha desempeñado un papel central en el giro político del estado hacia la derecha en los últimos años, fue suspendido de sus funciones desde que la Cámara liderada por el partido Republicano lo destituyó en mayo.
Desde que asumió el cargo en 2015, Paxton ha estado en el centro de una serie de escándalos. Sigue imputado por cargos de fraude de valores y se enfrenta a una investigación federal adicional después de que antiguos empleados lo acusaran de aceptar sobornos y abusar de su cargo.
Fue su pedido de US$ 3,3 millones en fondos estatales para un acuerdo con esos denunciantes lo que llevó a los republicanos de la Cámara de Representantes del estado a destituir a Paxton en una votación de 121-23, con dos miembros votando "presente".
Sin embargo, el Senado estatal, controlado por los republicanos, es un terreno más favorable para el asediado fiscal general. Allí cuenta con varios aliados conservadores, entre ellos el vicegobernador Dan Patrick, que presidirá el juicio. Su esposa, Angela Paxton, es miembro del Senado, aunque se le ha prohibido votar en el juicio.
He aquí un vistazo a la historia es Paxton, las razones de su destitución y la forma en que se desarrollará su juicio:
Paxton es una figura de larga trayectoria en la política de Texas, sirviendo en la Cámara de Representantes y el Senado del estado antes de su elección como fiscal general en 2014, cargo para el que fue reelecto en 2018 y 2022.
Hasta su destitución, era más conocido por desafiar los decretos ejecutivos y los logros legislativos de Barack Obama, incluidas las batallas contra el Obamacare y las órdenes de inmigración del expresidente.
En un intento de anular los resultados de las elecciones de 2020, pidió a la Corte Suprema de EE.UU. que invalidara los votos del Colegio Electoral de cuatro estados indecisos ganados por Joe Biden. La demanda fue desestimada.
Paxton viajó entonces a Washington para asistir a la manifestación "Stop the Steal" el 6 de enero de 2021, donde el fiscal general dijo a la multitud, que incluía a muchas de las personas que poco después se amotinarían en el Capitolio: "No dejaremos de luchar".
Paxton se ha enfrentado a escándalos durante años. Fue acusado por un jurado investigador en 2015 por cargos de fraude de valores tras las acusaciones de haber engañado a los inversores sobre sus vínculos financieros con una empresa de tecnología mientras vendía acciones de esa empresa. Ese caso aún no ha llegado a juicio y se ha retrasado por años de disputas sobre dónde debería celebrarse.
En 2020, altos colaboradores de Paxton publicaron una carta en la que acusaban al fiscal general de abuso de poder, soborno e influencia indebida, quejas centradas en los vínculos de Paxton con el donante y amigo personal, Nate Paul.
Cuatro de los exempleados demandaron más tarde a la oficina del fiscal general, alegando que fueron despedidos en violación de la ley estatal de denunciantes. En febrero, Paxton aceptó un acuerdo en el que no admitía culpa y los denunciantes recibirían US$ 3,3 millones. Entonces, pidió a los legisladores estatales que financiaran ese acuerdo.
Los encargados del juicio político en la Cámara presentaron casi 4.000 páginas de pruebas, desvelando más detalles de las extraordinarias acusaciones de que Paxton presionó a sus principales asesores para que tomaran medidas que beneficiaran a Paul, un inversor inmobiliario.
Paxton está acusado de aceptar US$ 20.000 en materiales para encimeras de Paul a través de un contratista durante la remodelación de su casa.
También se dice en las acusaciones que Paxton tenía una amante, a quien Paul contrató como un favor para el fiscal general, y que Paxton usaba un alias en Uber, "Dave P", para reunirse tanto con la amante como con Paul.
Paul fue detenido en junio por ocho delitos federales relacionados con la falsificación de registros financieros, y su abogado ha declinado repetidamente hacer comentarios a CNN.
El juicio político del Senado de Texas comienza este martes y se espera que dure dos o tres semanas. Patrick, vicegobernador y aliado de Paxton, presidirá el juicio como juez.
Este martes por la mañana, el secretario del Senado leerá uno a uno los 20 artículos de la acusación de la Cámara de Representantes y pedirá a Paxton o a su abogado que se pronuncie sobre cada uno de ellos. Paxton puede comparecer en persona o por medio de un abogado. Puede declararse culpable o inocente.
Tras la lectura de los artículos y las declaraciones de Paxton, los administradores del juicio político de la Cámara y su equipo jurídico dispondrán de 60 minutos para hacer su declaración inicial, seguidos por el equipo de Paxton, también con 60 minutos.
A continuación, los administradores de la Cámara comenzarán a presentar su caso. Cada parte dispone de 24 horas para presentar pruebas y testigos, proceso que podría prolongarse durante días. Los abogados de Paxton han dicho que el fiscal general no testificará, aunque es posible que los administradores de la Cámara le obliguen a subir al estrado mediante una citación.
Cada parte dispondrá de 60 minutos para los alegatos finales. El lado de Paxton cerrará primero, seguido por los administradores de juicio político de la Cámara.
Al final, los senadores deliberarán a puerta cerrada y presentarán un voto escrito para cada artículo.
Una condena requiere que 21 de los 30 senadores estatales elegibles voten en contra de Paxton. Suponiendo que los 12 demócratas voten para condenarlo, nueve de los 18 republicanos con derecho a voto también tendrían que encontrarlo culpable.
El Senado tiene 31 miembros. Sin embargo, la esposa de Paxton, Angela, no podrá votar ni asistir a las deliberaciones a puerta cerrada. Sin embargo, se le ha permitido asistir como miembro del tribunal.
En un principio, Angela Paxton dijo que no se recusaría, pero las nuevas normas del Senado le prohibieron votar. Permitirle participar en el juicio, sin embargo, ayuda esencialmente a su marido, ya que el umbral de condena es de 21 votos, en lugar de 20 si ella hubiera sido eliminada por completo del juicio.
En cualquier momento, la mayoría del Senado podría votar a favor de desestimar los cargos, lo que pondría fin al proceso.
Si el Senado vota a favor de condenar a Paxton, éste sería destituido. Pero el Senado tendría que celebrar otra votación para prohibirle ejercer el cargo de forma permanente.
Eso es lo que ocurrió en 1917, cuando el gobernador de Texas James "Pa" Ferguson fue destituido por malversación de fondos y se le prohibió ocupar cargos en el futuro. Su esposa, Miriam "Ma" Ferguson, se presentó a la gobernación en 1924, con la promesa de que Texas tendría "dos gobernadores por el precio de uno". Ganó, convirtiéndose en la primera mujer gobernadora del estado, pero perdió en unas primarias dos años después. En 1932 obtuvo un segundo mandato de dos años.
Paxton ha calificado su destitución de "farsa políticamente motivada" y ha negado sistemáticamente haber actuado mal.
El Texas Tribune informó que en un picnic del partido Republicano celebrado este sábado en el condado de Collin, Paxton criticó el liderazgo del partido Republicano en la Cámara de Texas.
"Vamos a limpiar la casa", dijo.
Paxton se ha alineado durante mucho tiempo con las fuerzas más conservadoras y de línea dura en el partido Republicano y muchas de esas fuerzas lo respaldan. Trump lo ha apoyado, arremetiendo contra los republicanos que lo impugnaron como "RINOS", o "republicanos solo de nombre", calificando su juicio político de "interferencia electoral".