Ley que prohíbe al dólar digital supera el primer obstáculo en el Congreso de EE UU
El proyecto de ley que pretende prohibir que la Reserva Federal de los Estados Unidos emita un dólar digital o su propia moneda digital de banco central (CBDC), fue aprobado en el Comité de Servicios Financieros del Congreso, dando otro paso hacia su promulgación final.
Durante una sesión del comité celebrada la tarde-noche del miércoles 20 de septiembre, el proyecto que fue presentado por primera vez en febrero de este año, fue aprobada la propuesta que evita que EE. UU. emita una CBDC.
Tom Emmer, el congresista que presentó el proyecto, aseguró en la sesión del comité que la regulación aprobada “detiene los esfuerzos” del presidente Joe Biden “de emitir una herramienta de vigilancia financiera que socavará el estilo de vida estadounidense”.
Ahora que el proyecto fue aprobado en el seno del Comité de Servicios Financieros de la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos, se estima que la propuesta sea debatida en el pleno. Si luego es aprobada, será remitida al Senado, donde dará sus últimos pasos antes de promulgarse.
Durante la sesión, Emmer recordó la esencia de las CBDC, que son monedas diseñadas por gobiernos, lo que las convierte en dinero programable que está controlado por un Estado.
A su juicio, si estos activos centralizados no se diseñan para emular el efectivo, “podría dar al gobierno federal la capacidad de vigilar y restringir las transacciones de los estadounidenses”.
“Esto no solo es alarmante, es francamente antiamericano”, repudió Emmer, quien citó los ejemplos de distintos gobiernos alrededor del mundo que, señala, “arman su sistema financiero contra sus ciudadanos”.
Entre esos ejemplos resalta China, donde el Partido Comunista (PCCh) usa la CBDC “para rastrear los hábitos de gasto de sus ciudadanos”. “Los datos se están utilizando para crear un sistema de crédito social que recompensa o castiga a las personas en función de su comportamiento”, criticó.
Otro ejemplo está en Canadá, donde el gobierno “congeló las cuentas bancarias de personas” que estuvieron involucradas en una serie de protestas que incluyeron a miles de transportistas. Eso ocurrió en 2022.
“Si no es abierta, sin permiso y privada, al igual que el efectivo, una moneda digital del banco central no es más que una herramienta de vigilancia al estilo del PCCh que puede convertirse en arma para oprimir el estilo de vida estadounidense”, dijo el congresista Emmer.
Lo que dice Emmer tiene sentido si se considera que las CBDC están pensadas para que los gobiernos puedan decidir qué pueden comprar sus usuarios. Esto de acuerdo con un exdirector del Fondo Monetario Internacional, Eswar Prasad.
Para Tom Emmer, el “apetito de vigilancia financiera” a través de las CBDC “está ganando un bastión” en Estados Unidos. Esto, tras recordar que la Casa Blanca emitió una Orden Ejecutiva para urgir la investigación y desarrollo de la moneda digital de banco central.
En ese sentido, el legislador aseguró que “no van a permitir” que Estados Unidos violente los derechos de sus ciudadanos. “Mi proyecto de ley garantiza que la política de moneda digital de EE. UU. esté en manos del pueblo estadounidense, no del Estado Administrativo, para que refleje nuestros valores estadounidenses de privacidad, soberanía individual y competitividad de libre mercado”, indicó.
Lo que señala Emmer se da en un contexto en que la CBDC estadounidense, el dólar digital, ya está en fase de pruebas en ese país desde hace casi un año. Como lo reportó CriptoNoticias, la Reserva Federal de Nueva York y varias entidades bancarias formaron parte de un experimento piloto con esa moneda digital de banco central.
Por otro lado, lo expresado por el congresista Emmer confirma la narrativa de que los avances que han dado las CBDC en todo el mundo se entienden como una “pendiente resbaladiza” para las democracias de los países, tal como lo sugiere la firma promotora de la adopción de bitcoin (BTC), JAN3.
Para esta compañía, dirigida por el bitcoiner Samson Mow, las CBDC tienen “peligros innatos” contra la libertad financiera de las personas. Algo que puede ser contrarrestado con el uso de BTC, la primera de las criptomonedas, que es completamente lo opuesta a las monedas digitales de banco central.