"La corriente succionó mis zapatos": el terror que sintió el pasajero sentado junto a la puerta del avión de Alaska Airlines que se abrió en pleno vuelo
Su cinturón de seguridad fue clave al "aferrarse para salvar la vida", asegura Cuong Tran, uno de los pasajeros en el avión de Alaska Airlines que perdió una parte del fuselaje en pleno vuelo en enero. El estadounidense originario de California contó a la BBC su mala experiencia, en la que el agujero fue succionándolo todo, incluido su teléfono, calcetines y zapatos por la descompresión incontrolada a 16.000 pies de altura (unos 4.875 metros) cerca de la ciudad de Portland, en Oregón. Tran es uno de los siete pasajeros que han presentado una demanda contra el fabricante Boeing, la aerolínea Alaska Airlines y la empresa de manufactura Spirit AeroSystems.