Guerra en Ucrania: el peligro constante en el que viven los últimos residentes de las ciudades abandonadas en el frente del conflicto
Mientras los misiles rusos destrozan la ciudad de Avdíivka, Hanna está desesperada por escapar. Sin embargo, su madre se rehúsa a marcharse. “No puedo dejarla”, nos cuenta Hanna por teléfono. “Ella dice que quiere dormir en su propia cama. Tiene 71 años y sufre de problemas en sus piernas. Si se queda sola, no puede ir a buscar agua o leña para la calefacción”. Atrincheradas precariamente en un departamento en un quinto piso, viviendo bajo bombardeos aéreos casi constantes, ellas están entre los últimos residentes que quedan en Avdíivka.