Las esclavas sometidas a cruentos procedimientos quirúrgicos que acabaron transformándose en las madres de la ginecología
En 1845 en Alabama, Estados Unidos, Anarcha, una esclava de 17 años, acaba de tener un bebé, pero hay un problema. "Una curiosidad quirúrgica muy desafortunada", escribiría más tarde el médico que la trató. El doctor, James Marion Sims, nunca antes había visto algo así, pero decidió hacer algo al respecto.