Productora de Robert De Niro deberá pagarle US$ 1,2 millones a una exempleada tras juicio civil
Un jurado de Manhattan declaró responsable este jueves a la productora del actor Robert De Niro, Canal Productions, de discriminación de género y represalias en un juicio civil relacionado con una disputa laboral que presentó Graham Chase Robinson exasistente de De Niro.
Robinson, quien trabajó como asistente ejecutiva de De Niro en 2008 y ascendió en la compañía hasta convertirse en vicepresidenta antes de salir en 2019, recibió US$ 1.264 millones por daños vinculados ambos cargos, confirmó con el abogado de Robinson este jueves.
El jurado también consideró los señalamientos que Canal Productions presentó inicialmente en un tribunal estatal contra Robinson por presunto mal uso de los fondos de la empresa. El jueves, a Robinson la declararon no responsable de esos reclamos.
“Estamos encantados de que el jurado haya visto lo que nosotros vimos y haya emitido un veredicto a favor de Chase Robinson contra la empresa de Robert De Niro, Canal Productions. La señora Robinson no solo ganó su caso contra Canal, sino que el jurado reivindicó por completo a la señora Robinson al declarar que los reclamos de De Niro contra ella carecían de mérito”, dijo el abogado de Robinson, David Sanford, a en un comunicado el jueves.
El jurado no declaró a De Niro personalmente responsable de las acusaciones de discriminación de género y represalias.
Según el diario The New York Times, Richard C. Schoenstein, abogado de De Niro y Canal Productions, dijo el jueves fuera del tribunal que “el señor De Niro ha sido exonerado”, pero que no estaba seguro de si Canal Productions planea apelar el veredicto.
se comunicó con Schoenstein para solicitar comentarios.
Robinson pidó al menos 12 millones de dólares por daños y perjuicios debido a una supuesta angustia emocional y daño a la reputación de parte De Niro y Canal Productions. Afirmó que sufrió discriminación de género mientras trabajaba para De Niro, alegando que él la llamaba “esposa de oficina” y la obligaba a realizar tareas como lavar sus sábanas, coserle la ropa y rascarle la espalda.
“De Niro y su alter ego corporativo, Canal Productions, Inc. sometieron a la señora Robinson a años de discriminación y acoso de género. Finalmente renunció porque ya no podía soportar el ambiente de trabajo hostil”, se leía en la denuncia de Robinson.
Canal Productions presentó una denuncia contra Robinson en 2019, acusándola de ver televisión en exceso mientras estaba trabajando, de transferir más de US$ 450.000 en millas aéreas a su cuenta personal y gastarlo en alimentos, viajes y otras compras.
Robinson negó las acusaciones de De Niro en su demanda.
La empresa había solicitado la devolución de tres años de su salario junto con otros daños y perjuicios. Sin embargo, el jueves fue absuelta de esas acusaciones cuando el jurado la declaró no responsable de las acusaciones de Canal Productions por malversación de fondos de la empresa.
La semana pasada, De Niro declaró como testigo y calificó las acusaciones de Robinson en su contra como "tonterías" mientras estaba en el estrado. De Niro también reconoció la afirmación de Robinson de que le pidió que le rascara la espalda, admitiendo que sucedió una o dos veces, pero no como “obscenidad” o “falta de respeto”.