Presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, dice que lo que Luis Rubiales hizo "fue inapropiado"
El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, condenó el beso no consentido que le dio Luis Rubiales a la delantera de la selección femenina de España, Jenni Hermoso, calificándolo de "inapropiado" en una entrevista concedida este miércoles a L"Equipe.
El presidente de la Federación Española de Fútbol fue suspendido provisionalmente el sábado por la FIFA, el organismo rector del fútbol mundial, después de que besara por la fuerza a Hermoso, durante las celebraciones de la victoria de la selección femenina en el Mundial.
"Por supuesto, lo que hizo fue inapropiado", dijo Ceferin cuando le preguntaron por el caso Rubiales.
"Todos lo sabemos. Espero que sepa que estuvo fuera de lugar. Es suficiente por el momento, porque el comité disciplinario decidirá", añadió según L"Equipe.
"Me entristece que un suceso así ensombrezca la victoria de la selección española. Deberíamos cambiar las cosas", prosiguió Ceferin, que también es uno de los ocho vicepresidentes de la FIFA.
Con Rubiales inhabilitado para "todas las actividades relacionadas con el fútbol a nivel nacional e internacional" durante 90 días mientras se tramita el procedimiento disciplinario de la FIFA, Ceferin dijo que "no había necesidad de suspenderle dos veces", en referencia al papel del español como vicepresidente de la UEFA.
CNN se ha puesto en contacto con la UEFA para recabar sus comentarios.
Rubiales no ha respondido a los múltiples intentos de CNN en busca de comentarios.
La semana pasada, Rubiales pidió disculpas por sus acciones, pero se negó a renunciar en un polémico discurso.
"Seguramente cometí un error, tengo que reconocerlo", dijo Rubiales en un comunicado grabado en vídeo.
"En un momento de euforia, sin ninguna intención de mala fe, pues pasó lo que pasó, creo que de una manera muy espontánea. Repito, no hubo mala fe entre ninguno de los dos", dijo.
También describió el beso como "mutuo", algo que Hermoso ha negado, diciendo que no fue respetada.
Además de la creciente presión para que dimita, Rubiales se enfrenta a una investigación que podría acabar con cargos de agresión sexual por parte de la fiscalía de España.