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El legado de Diego Maradona, tres años después de su muerte

El legado de Diego Maradona, tres años después de su muerte
- "Para nosotros los argentinos, el 10 es un número muy especial. Vos decís ‘10’ y automáticamente se te viene Maradona a la cabeza", dijo Lionel Messi en semanas atrás en diálogo organizado por Adidas con el exfutbolista Zinedine Zidane.
Diego Maradona tendría hoy 63 años. Habría visto campeón del mundo por tercera vez a la Selección de Argentina. Estaría, como siempre, con su aura magnética, con su presencia de fuego y con ese espíritu quijotesco que marcó el sendero de su vida.
Maradona fue un rayo que recorrió el mundo gracias a sus hazañas deportivas, a su rebeldía incombustible, a su andar intrépido y sin pausas. Esa leyenda en vida se apagó un 25 de noviembre de 2020, a sus 60 años. Aunque con la inmortalidad que había adquirido, por una vida de tan alto voltaje, la cual tras su deceso no hizo más que agrandar ese legado de una figura distintiva mucho más allá del propio fútbol.
Este 25 de noviembre se cumple el tercer aniversario de su adiós físico pero "no es una cuestión de fechas", dice a CNN Daniel López Maradona, el sobrino del icónico futbolista. Comenta que todos los días lo recuerda y que si bien en este tiempo, junto a su familia, han ido asimilando su partida, aún le cuesta creer que ya no está entre nosotros. En estos tres años de ausencia de Maradona, su ida ha cambiado el paisaje de muchos lugares del país y principalmente de la ciudad de Buenos Aires, que se ha colmado de murales, de gigantografías, de sus frases y momentos memorables que han quedado reflejados en varios rincones de la metrópoli. El artista Marcelo Chiarello, quien homenajeó a su ídolo Maradona a poco de fallecer con un santuario que recorre la vida del astro en el barrio de Mataderos, nos narra que a "Diego se lo mantiene vivo y se lo defiende todo el tiempo". Este enamorado de Maradona menciona a CNN que en su santuario "no está la fecha de fallecimiento" de Maradona o la palabra infinito, "no como negación", sino porque con su arte y sus frases "nos dejó enseñanzas que están más vigentes que nunca", dice Chiarello. Ese tiempo ha pasado con multiplicidad de momentos resonantes como ha sido la más reciente Copa del Mundo en Qatar, donde no solo la propia FIFA sino que también la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) lo han homenajeado al ser la primera cita mundialista sin la presencia del artista de la pelota. Lo más importante fue el tributo que los jugadores de la selección que terminó consagrándose con el tercer título mundial para Argentina, encabezados por Lionel Messi, quien tras la consagración aseguró: "Creo que él desde arriba hizo fuerza para que se dé". Más cerca en el tiempo, Dalma Maradona, una de las hijas del astro, lo homenajeo en este 2023 con un documental que se exhibe en el canal HBO Max bajo el título "La hija de Dios", en el cual como un mantra dijo: "La historia de mi papá se contó un montón de veces, pero la historia de mi papá conmigo solo la puedo contar yo". En el tráiler, Dalma Maradona aparece en un video siendo niña, junto a su mamá Claudia, y con una narración en off diciendo que cuando era chiquita no lograba dimensionar lo que significaba ser hija de Maradona. La plataforma HBO Max es parte de Warner Bros. Discovery, la empresa matriz de CNN. Quien nos dice lo que significó ser compañero es Carlos Javier Mac Allister, quien experimentó junto a Maradona resonantes momentos en Boca Juniors (1992-1993) y la Selección de Argentina (1993). "Generoso", dice a CNN el ex lateral, que nos comentó un momento muy íntimo sobre un regalo que el icónico futbolista le hizo a él y a compañeros como Juan Sebastián Verón, Cristian “Kily” González, entre otros, dado que en poco tiempo Maradona les dijo que dejaría de jugar, y les hizo un regalo tan especial como de mucho valor económico. Fue un "rebelde", agrega Mac Allister, quien remarca que Diego "fue un hombre que transpiraba energía", para remarcar que "Diego se enfrentaba a cualquier cosa. No le temía a nada ni a nadie". La inmensa figura del "Pibe de Oro" conquistó el olimpo futbolístico en México con la consagración de Argentina en el Mundial en 1986. Maradona volvió a México en 2018 para dirigir a los Dorados de Sinaloa, y en ese lugar donde transitó su última experiencia fuera de Argentina, lo hizo con Daniel López Maradona, su sobrino, quien nos narra que para la estrella era surrealista salir a caminar para ir a un centro comercial o a un supermercado sin que nadie lo molesta. "Todo el mundo lo conocía, pero lo respetaban, y le preguntaban si podían acercarse a tomar una foto o pedir un autógrafo", remarca López Maadona. Articular el vínculo de esa manera tan cadenciosa, respetuosa y diferente lo cautivó, nos comenta su sobrino. En junio de 2019 Maradona renunció al cargo de director técnico de Dorados de Sinaloa: "Hola a todos. Quería dejar en claro que mi salida de Dorados tiene que ver con mi salud", escribió Maradona en Instagram haciendo referencia a cirugías que venía postergando de rodilla y de hombro. "Los médicos me piden que pare, porque pasan los años y cada vez me duele más". Maradona se instaló en Argentina y unos meses después, en septiembre de 2019, se transformó en el nuevo director técnico de Gimnasia y Esgrima La Plata. Su llegada al club de las diagonales causó conmoción y recorrió el mundo, pues regresaba a trabajar en su país tras 9 años luego de dirigir a la Selección de Argentina en el Mundial de Sudáfrica 2010. Maradona se instaló a vivir en la propia ciudad platense. El 2 de noviembre de 2020 Maradona fue trasladado primero a una clínica de La Plata, y horas después a otra clínica de Olivos, por una urgencia dado que se le detectó un hematoma subdural en su cabeza y fue intervenido quirúrgicamente. Maradona fue dado de alta el 11 de noviembre. Se instaló en el barrio privado San Andrés, Tigre, provincia de Buenos Aires. El día 25 de noviembre Maradona falleció por un paro cardiorrespiratorio. El presidente de Argentina, Alberto Fernández, decretó tres días de duelo nacional. El velatorio se llevó a cabo en la Casa Rosada, donde multitudes fueron a despedir al icónico futbolista. Su féretro fue envuelto con la camiseta de la Selección de Argentina junto con su emblemático número 10. Sus restos descansan en el cementerio de Bella Vista, provincia de Buenos Aires, donde también descansan los restos de sus padres Doña Tota y Don Diego Maradona. "En la familia el dolor ahora se digiere mejor. Todo el tiempo aparecen fechas, recuerdos, anécdotas, momentos", narra Daniel López Maradona. Uno de esos momentos especiales fue la de compartir almuerzos que consistían en ir a comer asados todos los domingos con él luego de su regreso a Argentina en 2019. “Era una manera de ‘replicar’ lo que hacíamos en casa de mis abuelos (Doña Tota y Don Diego), padres de Diego, cuando cada domingo nos juntamos a comer", agrega su sobrino. El coro gritando "Maradona" fue un himno desde que su magia irradió las canchas en la década los años 70. Como la luz de un cometa, ese coro colonizó el mundo. Su nombre se perpetuó en cada lugar del planeta. Su vida viajó como ese cometa a velocidad supersónica. "Lo que vos haces en un año, yo lo hacía en un día", comentó a CNN López Maradona sobre lo que le dijo la figura que quiso enormemente, con quien también tuvo cambio de pareceres, pero que siempre amó por su cercanía familiar, por su compromiso y solidaridad. Aunque un aspecto especial para su sobrino es que la inmensa fama que siempre acompañó a su tío lo mantuvo siempre "igual de natural con todos nosotros”. Sus jugadas mágicas, sus goles imposibles, sus danzas con el balón están por doquier, no hace más que agrandar su legado, tal como Messi se lo verbalizó a Zinedine Zidane: "Toda la vida, desde chiquitos, los que crecimos con el fútbol queríamos ser como él (Maradona), si bien después ninguno llegó a ser como él, la ilusión y el deseo siempre era ese".